Mis pesadillas

Suelo tener tres, los niños, el piso y el trabajo. Hay días que sueño con mis tres pesadillas, me despierto de un mal sueño y empiezo con otro.
Sueño con tener niños, pero cuando me despierto me doy con la realidad, mi realidad “la infertilidad”, la lista de espera y las visitas en las que no se aclara nada. Ya os contare el trocito que llevo recorrido, que comparado con muchas chicas es poco, pero como se me acumulan las pesadillas se me hace duro.
Hoy he soñado con niños, no sé muy bien de que iba el sueño, pero bueno lo llevo bastante bien en este momento el tema niños; hay días peores.
Luego el sueño a cambiado, le ha tocado el turno al trabajo; es mi gran pesadilla des de noviembre, aunque las injusticias, según mi punto de vista, ya hace años que se producen para las españolas. No lo estoy pasando nada bien, y mira que me gusta lo que hago, aunque al principio no quería trabajar aquí; pero me supera el hecho de sentirme la última persona a la que van a tener en cuenta.
Me he despertado realmente mal, y luego al quedarme en la cama pensando ha sido peor, las lagrimas resbalaban por mis mejillas de pura impotencia. Y es que encima soy idiota, porque me preocupo por las cosas del trabajo para que salgan bien. No os cuento mas ahora porque tengo que ir a trabajar “jajjajaja”, con las ganas que tengo yo hoy, pero necesito el dinero.
Y mi tercera pesadilla, hoy por suerte no le ha tocado a esta, es el piso; pues después de conseguir tener el piso, ahora estoy pagando una hipoteca y estoy viviendo en otra casa. Como este problema lo tenemos medio resuelto, y tampoco está en nuestras manos hacer nada, pues lo llevo bastante bien; me desespero mas cuando nos dicen que ya está resuelto que en una semana o quince días volvemos al piso y de repente choco con la realidad, osa que no, que no está resuelto y que sigo aquí esperando.
Por suerte cuando estoy de bajón tengo a mi marido al lado para animarme, y viceversa, cuando le toca a él el bajo, allí estoy yo con mi optimismo. La verdad es que siempre creo que las cosas se arreglaran, mejor o peor pero que llegaran. Si tiene que llegar el día que este en mi piso, con mi marido y mis hijos, trabajando todos los días a gusto y que a mi marido también le irá bien su trabajo, sin tener de preocuparse de tener un bajón en la faena, y podamos pagar nuestra hipoteca tranquilamente y ser felices. Yo no pido que me toque la lotería y ser rica y no sé qué y no sé cuantos; yo solo quiero poder trabajar y tener mis niños y mi marido en nuestro hogar.
Haber que día mi sueño se hace realidad y desaparecen mis pesadillas para no volver jamás.
Quisiera haberos explicado más mi situación antes de llegar a mis pesadillas, para que me entendieras mejor, pero al levantarme mal. Bueno ya os explicare en otros post porque no estoy a gusto en el trabajo, porque no estoy en mi piso después de lo que me costó conseguir entrar en él, y en qué punto estamos en nuestra lucha por tener un bebé.